miércoles, 19 de octubre de 2011

Pasado pisado,

presente de frente.

Llegó la hora de ser feliz.

Momento de reírme a carcajadas sin tener motivo, de ir por la calle sonriendo, de no acordarme que pasó ayer ni de como volví a casa, de cantar bajo la lluvia y correr sin rumbo, tengo ganas de besar sin miedo y cometer locuras, tengo ganas de bailar , tengo ganas de soñar, ganas de sentirme la persona más feliz del mundo.

De "el barco".

Una vez mi mamá me contó un cuento de un niño que no tenia miedo, se llamaba Juan; Juan sin miedo. Era tan valiente que se enfrentó a brujas o fantasmas y hasta leones, sin pasar ni pizca de miedo. Pero eso solo es un cuento. Mi mamá también me dijo que no existe nadie que no tenga miedo y que hay tantas clases de miedo como personas en el mundo. Miedo a perder las cosas que quieres aunque sean muy pero que muy pequeñas, miedo a las mariposillas que sientes en la barriga cuando te gusta un niño, miedo a lo que no se puede explicar con las palabras o el miedo que tienes del monstruo que vive dentro del armario al que solo miras cuando eres tan valiente como para mirarle a la cara.

jueves, 13 de octubre de 2011

Y siempre con mi enorme ego.

Lucho, y no me rindo. Sigo andando, combatiendo, disfrutando. Sorprendiendo y siendo sorprendida. Viendo la meta aparecer con cada paso derecho y viéndola desaparecer a cada paso izquierdo. Y aprendo, que si no es hoy, será mañana, y luego olvido. Olvido detalles y sigo a lo mío, pero he reido solo para hacer creer a la gente que soy feliz. He llorado hasta que se me agotasen las lágrimas, he perdonado lo imperdonable.He tenido , tengo y tendré a las mejores personas cerca. He querido como nadie lo hará jamás. He conseguido fuerzas donde no las había. He hecho reir a la gente con mil tonterias. He tenido el valor de construir un futuro que jamás se cumplirá. Me he comportado como una niña solo para que vieran que todavía tengo algo inmaduro dentro de mi. He sido el pañuelo de lágrimas de aquellos que se han derrumbado. He llamado por teléfono solo para que se acordaran de que existo. Me he echo la sorda solo para no oír lo que no quería escuchar, y la ciega para no ver lo que dolía. Me he guardado cientos de lágrimas para hacer creer que soy fuerte. He tenido momentos de locura solo para ver como la gente es feliz.. Y hoy,he sido capaz de levantarme, mirar al frente y seguir adelante.

A veces es preferible no tener nada.

na-da.

Río cuando puedo, lloro cuando lo necesito, duermo para evitar lo segundo.

:/

sábado, 8 de octubre de 2011

Que todo te resbale.

Cuando todo salga mal; espérate, no tengas prisa. Los malos siempre pierden y los buenos siempre ganan.